Si buscas ese elemento de decoración único y distintivo; si todavía no has encontrado en un lienzo esa imagen que en tu mente coge forma; si quieres tu óleo completamente personalizado, nosotros te ayudamos. Lejos de los cuadros típicos, de los productos hechos a ordenador, podrás decorar ese rincón tan especial de forma completamente exclusiva. Un óleo pintado a mano y por encargo es una pieza única e irrepetible que, en este caso, se realizará completamente a tu gusto.

Esto es fruto de una afición, no una forma de ganarse la vida, por lo que aseguramos un precio realmente ajustado. Tú eliges qué se plasmará en el lienzo, así como sus colores y características, ¡nosotros nos encargamos del resto!

Contacta con nosotros y cuéntanos tus ideas. Nosotros te asesoramos y hacemos presupuesto sin compromiso.

viernes, 11 de abril de 2014

Tutorial: Antifaz Veneciano

Durante mi viaje a Italia quería comprar un antifaz Veneciano, ya que buscaba algo personalizado para decorar mi casa y tenerlo como recuerdo. Dado que los precios eran muy elevados, pensé que no había nada más personalizado que un antifaz hecho por mi misma, así que compré un antifaz en blanco y a la vuelta comencé a decorarlo. Creo que es una bonita forma de tener un recuerdo de Venecia, con poquito dinero y sobretodo, totalmente a tu gusto, sin preocupaciones de si será el color adecuado, acorde a la decoración de tu casa o si estará realmente hecho a mano. Por ese motivo os voy a mostrar como lo he realizado, por si os animáis a decorar vuestro propio antifaz, para vosotros o incluso para regalar.

En primer lugar, necesitareis un lápiz para hacer el dibujo inicial, pinturas acrílicas para pintarlo, purpurina para darle un toque de brillo, barniz, para conservar la pintura y añadir también un poco de brillo, pasamanería para decorar los bordes de la máscara y otros complementos que te gusten para decorarla. Yo coloqué algunos brillantes, pero también puedes ponerle plumas, flores de tela o cualquier cosa que se te ocurra.


Una vez que tengamos todos los materiales, podemos comenzar a decorar nuestra máscara. 

Debemos decidir que dibujo vamos a hacerle. Puedes dejar volar tu imaginación, o buscar algunas ideas en Internet. Una vez lo tengas claro, es hora de hacer el dibujo a lápiz.


Ahora que tenemos todos los dibujos hechos, podemos comenzar a pintarla. Este es el resultado.



El siguiente paso es echar la purpurina. Puedes comprar pegamento con purpurina, que es más fácil de echar, o como en mi caso, aplicar cola blanca con un pincel e ir echando la purpurina encima para que se vaya pegando. Yo solamente utilicé purpurina negra, (aunque no se aprecia demasiado en la foto, todas las zonas negras están cubiertas), pero podrás utilizar los colores que más te gusten.



Una vez que hemos echado la purpurina es hora de barnizar la máscara. Utiliza un barniz incoloro y aplícalo con una brocha que no sea demasiado rugosa o utiliza barniz en spray. Ten cuidado de que quede completamente liso y no tenga demasiado producto en ninguna zona. Es posible que al aplicar el barniz la purpurina se extienda por el resto de la máscara y no sólo donde la habíamos colocado, pero no te preocupes, queda un efecto bastante bonito, tan solo tendrás que dirigirla con la brocha de modo que no queden zonas llenas de purpurina y otras vacías. Si prefieres que la purpurina no se mueva de su lugar, utiliza el barniz en spray. Después de esto, habrá que dejar secar la máscara durante al menos 4 o 6 horas.



Ya casi hemos acabado. Solo nos quedaría cubrir los bordes con la pasamanería y colocar los elementos de decoración que hayamos decidido colocar. Puedes utilizar pegamento termofusible, tanto para colocar la pasamanería como los detalles, en mi caso algunos brillantes.



Este es el resultado final. Espero que os haya gustado y que lo intentéis hacer vosotros. Si tenéis alguna duda podéis poneros en contacto conmigo. Y si os ha gustado o incluso lo habéis intentado hacer en casa, estaré esperando vuestros comentarios.



martes, 24 de septiembre de 2013

Algunos cuadros realizados


Si estás pensando en pedir tu "lienzo a la carta" y todavía dudas del posible resultado y/o del posible precio, a continuación se incluyen algunos ejemplos de cuadros realizados con sus precios, para que puedas hacerte una idea de los trabajos.

En primer lugar, se incluye una composición de 4 lienzos formando un conjunto de 125 x 67 cm. Es ideal para decorar el frente de la habitación o una pared del salón. Al utilizar lienzos de 3 cm de espesor, no será necesario colocarle marco. El precio total sería 284 €. A continuación se desglosa el precio de cada uno de los cuadros por separado con sus medidas.


125 x 67 cm (284 €)
40 x 40 cm (76 €) 
30 x 60 cm (76 €) 
30 x 60 cm (76 €)

 20 x 40 cm (56 €)
 Si te gustan los paisajes, este puede ser tu estilo.
61 x 50 (86 €)

38 x 46 cm (82 €)
Otro tipo de pinturas puede ser un bodegón, algo más clásico, pero que en cierto modo, nunca pasa de moda.

41 x 33 cm (53 €) 
Y por qué no, un cuadro para decorar la habitación de los más pequeños, o para regalar cuando alguno de tus amigos ha tenido un bebé.

41 x 33 cm (53 €) 
La última propuesta está destinada a esos apasionados del deporte. Poder tener un cuadro de tu bicicleta si eres ciclista, o un cuadro temático de cualquiera que sea tu afición es posible.

20 x 40 cm (66 €)
Los precios indicados son estimativos y variarán en función del destino de entrega, la dificultad de la imagen o el tamaño de lienzo elegido.